14 de enero de 2014

He pasado toda mi vida asustado. Ahora me levanto para darle una patada en los dientes al miedo, ese bastardo.

Estoy cansado de sentirme aplastado por hombres avariciosos que no creen en nada. Tengo que cambiar eso.

Llegará un día en que tengas que verte obligado a tomar decisiones que afecten la vida de tus seres queridos, decisiones que te cambiarán para siempre. Llegas a una edad en la que comprendes que ser un hombre no consiste en el respeto o la fuerza, sino en ser consciente de todo aquello que tocas. 
Los niños miran hacia dentro regodeándose en sus propias necesidades egoístas. Los hombres miran hacia fuera fijándose en las necesidades de los demás. Yo estoy en ese punto. Estoy mirando a la cara a una de esas decisiones y ella me devuelve la mirada, con ojos curtidos por la historia, y me llama cobarde, asesino, fraude... Quiere que me rinda y que huya del cumplimiento de mi destino como un niño asustado. Pero hoy no haré eso, hoy seré el hombre que intento ser, haré que os sintáis orgullosos.



Besos y abrazos para quién los quiera.
SED FELICES.